10 abril 2011

Amor, fascinación y compromiso.


El poeta de nuestra generación viene en mi auxilio, para darle prosa y rima a un sentimiento... siento "que aunque parezca mentira, tu corazón va a sanar".

El lunes a la noche, mientras circulaba en motocicleta (yo era el acompañante) pude comprobar la terrible e insoportable verdad de que "nadie nace sabiendo; nace sabiendo que morir también es ley de vida".

Eso me llevo a pensar en el amor, en el amor de mi vida, en la vida en el Amor. Y estuve muy de acuerdo con que "nadie sabe porqué un día el amor nace, ni sabe nadie porqué muere el amor un día". Yo mismo, después de estar al borde de la muerte, entre lágrimas me pregunte "¿De qué sirve todo? ¿Por qué me esfuerzo en sostener algo tan efímero y frágil como el amor si ni siquiera puedo sostener mi propia vida?... ¿Donde quedaron todos mis ideales, mis valores, mis victorias y derrotas cuando me agarraba con todas mis fuerzas a la moto que derrapaba? ¿un mala decisión puede terminar con todo así, sin más?¿Era mi vida la historia de tantos otros pobres desafortunados que, con sangre en el asfalto, pasan a otra vida?"

Quien vive una vida guiado por el amor, debe avanzar más allá de la fascinación, más allá de la contemplación y del deseo... debe entender el compromiso como requisito de existencia del amor. El compromiso con la vida, con la salud, con la reflexión... nadie que ama puede separar la emoción y el sentimiento de la conducta y la responsabilidad.
El compromiso es el amor responsable, es el amor reflexivo, es el amor revolucionario. Es el amor de un corazón que va a volver a quebrarse, mientras le toque pulsar...
"y volverás a esperanzarte y luego a desesperar, y cuando menos lo esperes, tu corazón va a sanar"

para L.M.

1 comentario:

VENUS dijo...

hola terri, que es de tu vida? ya no venis al verjel? creo que te trato muy mal un lector no? bueno que se curtan, besos... lei convenciones tu entrada,... los que estan mal son ellos.