Es hora de silencio.
Luto de la ideología.
Vacío de la espiritualidad.
Frente a la muerte y frente a Dios, guardo mi voz.
Me zambullo de cabeza.
Aguanto la respiración.
Y la voz se ahoga...
"Bajá la voz, esto es un entierro, terrícola".
Sin embargo yo estoy aterrado.
La situación me deja sin palabras...
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